Me gusta hacer clasificaciones que olvido al día siguente por su evidente despropósito y falta de rigor. Aquí va la de hoy:
Hay cuatro tipo de escritores: aburridos, pretenciosos, disfrutables y geniales.
Los aburridos son los peores, claro. Son los que escriben esos libros en los que no puedo leer siquiera un capítulo, en los que sufro cada vez que cambio de hoja y pienso «oh por dios, esta sección todavía no termina, una página en blanco, por piedad». Los escritores pretenciosos son los que piensan, antes de cada línea, que están creando una obra maestra, una frase que los justificará ante sus jurados, que serán citados en otros libros e invitados a Ferias Literarias y Premios Internacionales… sopor. Los disfrutables son los escritores con obras que se leen de corrido, que te enganchan y te avientas un libro completo en un fin de semana y piensas… «esto es bueno, debería buscar otros libros de este buen hombre«. Luego están los geniales, aquellos de quienes deseas, de corazón, tener y releer su obra completa. Son los menos, pero hay suficientes como para leer el resto de tu vida.
Tati dijo:
Muy bueno! Como escribidora soy lastimosamente pretenciosa, queriendo ser disfrutable. En qué categoría te ubicas, si quisieras leerte?
Saludos!!
Edgar Valdés dijo:
Pretencioso, definitivamente. Espero llegar a ser pretencioso-disfrutable, o pretencioso-genial. Pero me parece que el adjetivo pretencioso irá siempre ligado a mi estilo, que está lleno de referencias que generalmente no explico, o condicionado por un flujo de conciencia en el que no me detengo para hacerlo más digerible.
Saludos.
Edgar Sandoval Gutiérrez dijo:
Y digo yo, qué se sentirá ser un escritor aburrido-genial? qué se sentirá saberse de los dos extremos?